Requiem a tu ausencia

Caía la noche azul
desteñida, pesada
sobre mis hombros.

El cielo crujia de ausencia
era materia en mis manos vacias
deshabitadas de ayeres imaginados
por la mente de dos locos
que en el éxtasis de su amor
conjuraron un futuro
Juntos, de los dos.

Me asfixie,
nade en recuerdos
invadida por cenizas
de una posibilidad absoluta y negada
que fumé para calmar las ansias de la soledad.

Imaginé, soñé
y tu imagen huyó de la ventana de mis ojos
tuyos, como toda yo.
Y mi cuerpo terminó cediendo
al cansancio que provoca lo imposible.

Compró resignación
para hacerse a la idea de la nueva perdida
de lo que jamásle perteneció.
Y añadí una mas
a esta colección de ausencias
que resulta ser mi vida.

Conjuré tu recuerdo,
te hiciste carne en mi,
amanecer tardío,
pecado inconfesable.

Habitas en mis entrañas
congestionadas de dolores
pensados para interpretar
mis caricias mas lejanas
las que no te dí,
las que retuve
cada vez que te miraba partir.